Bruno Lima, opuesto de Gigantes, fue el máximo anotador del partido con 29 puntos, pero eso no bastó para detener a Bolívar, ahora líder con 17 puntos y sin derrotas tras seis presentaciones. El Celeste contó con 23 anotaciones de Jesús Herrera y un protagonismo determinante de Nicolás Uriarte, que no sólo condujo al equipo, sino que se encargó de cerrar el encuentro en el tie-break.

El primer set fue lo único de la velada que no tuvo equivalencias, porque Bolívar tuvo un arranque furibundo de 5-0 que dejó a Gigantes sin reacción. Herrera metió 6 puntos en el set y Osniel Mergarejo lo siguió con 5, números que, apuntalados por el alto error del Dino (9 en el set), derivaron en una rápida resolución para la visita. Camilo Soto acertó con el ingreso del venezolano Willner Rivas, pero ya era tarde para alterar el 19-11 en contra de aquel momento. Herrera, por posición 4, sentenció el holgado 25-14 de apertura.

A pesar del golpe, a continuación, Gigantes empezó a jugar. La visita debió apelar a su trío cubano Herrera-Mergarejo-León para escaparse a 10-6, pero el dueño de casa controló por bloqueo al joven León y además Bolívar erró más que antes, lo que derivó en un 14 iguales promediando el capítulo. Ahí, las Águilas se reagruparon nuevamente gracias a Herrera, que primero quebró a 17-14, luego mantuvo (22-18) y finalmente, otra vez por zona 4 y otra vez con su sexto punto del set, lo cerró por 25-20.

Sin embargo, la historia iba a cambiar. Es que Gigantes empezó a disfrutar más puntos de Lima y también a controlar a Herrera en bloqueo-defensa (sólo 2 veces sumó el artillero cubano en el tercer set), lo que le permitió ponerse 5-2 y más tarde 14-12. Bolívar no tiró la toalla, pero Lima apareció para apagar todos los focos de incendio (20-18) y el desenlace fue de los centrales: Jonadabe Carneiro ayudó con un ace y el histórico Javier Sánchez, con dos bloqueos al hilo, descontó por 25-21.

Envalentonado y empujado por su gente, Gigantes mantuvo la presión. Fue aquí que Javier Weber mandó a la cancha a Brian Melgarejo, de buen partido, pero la defensa local hizo lo imposible para contenerlo a él y a Herrera, que volvió a su actividad habitual (7 puntos en el set). Así, el Dino pasó de 14-11 a 20-16, y aunque Herrera apareció en contra y bloqueo para achicar (21-20), un par de errores de saque de Bolívar ayudaron a la causa local y Lima, por 25-23, mandó las cosas al quinto set.

El parcial decisivo tuvo 7 puntos de Lima, una garantía para Gigantes en el goleo, pero Bolívar replicó con puntos clave de Uriarte para números de 6-4 y 8-6. Parecía que el local se lo llevaba, con un esfuerzo titánico de Ruiz, Finoli y Filardi en defensa (9-8), pero Agustín Loser disparó un ace clave en 11-10 y, con el tablero a favor, Bolívar rotó y esperó. Fue con otro ace, esta vez de Uriarte (su cuarto punto del set), que el Celeste inició su festejo por 16-14.