Se contagió en enero – junto a su hija - y ambas sufrieron una larga lista de síntomas. Desde el primer día su hija debió ser medicada, debido al cuadro que presentaba y por precaución, ya que sufría de complicaciones respiratorias crónicas.

El 5 de enero ambas fueron hisopadas con resultado positivo. Nieves comenzó con un estado semi-gripal al que añadió dolores corporales/musculares, cefaleas, diarrea, otitis y pérdida de gusto-olfato.

En tanto, Macarena añadió a los padecimientos antes mencionados, complicaciones respiratorias.

“Perdimos completamente el apetito, durante diez días solo consumimos agua mineral y Gatorade®”

Ambas eran acompañadas por el equipo de Salud a través del programa de seguimiento médico. Una Dr. pidió realizarle una placa a Macarena, con el fin de constatar el estado de sus pulmones. Al ver que todo estaba bien, continuaron el tratamiento con aerosoles y demás.

A principios de marzo, se podría decir que ya estaban recuperadas y sólo había sido un susto.

El segundo contagio se dio hace pocos días, cuando su hermana vino desde el campo a Bolívar a cuidar a su hija, que había sufrido un accidente doméstico.

"Yo le dije que no se sintiera para nada culpable porque eso me pasó a mí, de mi huella se contagió Macarena y mi papá, por suerte mi papá fue totalmente asintomático"

A raíz del segundo contagio, su hija perdió el gusto-olfato y, en ella, los síntomas fueron mucho más leves. Afortunadamente, ambas fueron dadas de alta sin ningún tipo de complicación.

Lamentablemente, y a raíz de reiteradas donaciones de sangre de forma periódica, Nieves bajó su conteo de glóbulos rojos por lo que no podrá ser donante de plasma. Tal vez más adelante pueda hacerlo.

Los invitamos a escuchar la entrevista completa

Audio: Daniel Ledesma (Radioshow)

Edición y redacción: Carla Romero