Se refirió al crecimiento de la ciudad y lo que significa la urbanización en impacto, ante las lluvias más copiosas que requieren reservóreos y drenajes que ya no están por la edificaciones. Además, hizo historia desde las inundaciones más fuertes que comenzaron en los años '80 y la posterior voladura de la ruta 226, para evitar la inundación de la ciudad.

Las obras que ampliaron la capacidad de drenaje y que aún no alcanzan

Se hicieron, donde se voló la ruta, que nosotros le decimos, después del canal San Jorge se hicieron dos alcantarillas más, después se hicieron tres alcantarillas más en el Canal San Jorge hace un par de años y el Vallerga. No sé si tenemos casi el doble de la capacidad de lo que tenía en el 85 una pasada de agua.

El Vallerga tiene una traza hasta que llega y otra más angosta después que pasa la ruta y tira para los costados?

Sí, eso es lo que vi el domingo. Porque en el Vallerga se hizo una limpieza y una ampliación de alcantarillas hace un par de años desde la ruta 226 hasta Ibarra, es decir hacia el sur del partido antes de atravesar la ruta 226. El problema que nosotros tenemos en la cuenca de Las Encadenadas. Nosotros pertenecemos a la Cuenca del Salado. La cuenca del Salado tiene aproximadamente 18.000 hectáreas. La provincia de Buenos Aires tiene 30.000. O sea que más de la mitad de la provincia de Buenos Aires sale por San Borombón. Nada más que por un lugar chiquitito, que es la bahía de San Boronbón. Si uno recorre el Partido de El Tordillo, encontrarás, mas o menos16 canales. Está todo canalizado porque todo sale por ahí.

"Prácticamente toda la provincia, salvo el norte de Buenos Aires que sale por el Paraná, por decirte algo, y el sur de la provincia que sale por el mar, tema Bahía Blanca, todo el resto de la provincia de Buenos Aires"

Digamos, los divisores de agua que son Tandil y Ventania, y todo el agua que nosotros recibimos de Córdoba, da famosa Picasa, lo que se conocía con el Río Quinto. Hay un pueblito que se inunda siempre, se llama Aragón Castellano, ahí en el límite con la provincia de Buenos Aires. Por lo tanto, no es, digamos, fácil encausar toda esta cantidad de agua por un solo lugar. A su vez, nosotros, Bolívar pertenece, más allá de pertenecer un pedacito a una de las regiones al norte de Bolívar, nosotros pertenecemos al sistema de las encadenadas, las encadenadas del oeste.

Esto tiene una historia, que es que en el ‘75 cuando el sistema de lagunas de las encadenadas que va para atrás, que es un sistema de cuenca cerrada, se empezó a quedar sin agua, políticamente todos estos partidos dijeron, che, queremos turismo pero nos estamos quedando sin agua. Entonces, deciden construir el Canal Ameghino, que es un trasvasamiento de cuenca. Todo el agua que viene así, digamos, de las sierras, que tiene que ir a Lamadrid u Olavarría allá arriba, termina drenando en la Ruta 26, a través del Vallimanca. Cuando vinieron las inundaciones, el Canal Ameghino se llevó las compuertas, se llevó todo y se inundó todo esto. A partir de ahí, ahí empiezan también los problemas nuestros.

El impacto de la decisión de Guaminí

Acá, en la Ruta 65, si pasaste habrás visto las famosas bombas. Con eso querían sacar el agua, no la pudieron sacar. Pero, hay unas compuertas. El otro día fueron las que cerraron. Ves que hay un pequeño desnivel entre esto y esto. Claro, ves que hay un desnivel, pero esa agua va para allá, o va para acá.

“Si cerras la compuerta, en la Ruta 65, viene para Bolívar. Si vos dejas la compuerta abierta, va para Cochicó. El otro día, cerraron esta compuerta, entonces el agua empezó a venir para Bolívar”

A su vez, el famoso Partidor Piñeiro, que es otro canal que se hizo también en esa época, ahí tiene una compuerta. El Piñeiro recibe de entrada, en la salida nomás, el agua de las sierras. Pero hay una división, entonces, en esa división, que ahora lo hicieron algo monstruoso, con un par de compuertas, o mandan el agua para la zona de las Encadenadas, que acá corre el riesgo, ellos dicen que corre el riesgo a Guaminí y Carhué de inundarse, o mandan el agua para la Laguna de Juancho, después Juancho, El Tordillo y Bolívar. Entonces, lo que pasa ahora es que recibimos a través del Huáscar una cantidad de agua en poco tiempo.

En 21 días el agua se empieza a ir, antes iba en 7, 8, ahora en 20, 21 días. Nosotros tenemos una zona de Bolívar más complicada que esta vez no se sintió afectada porque no llovió una cantidad, es zona es Hale, Unzue y Villa Sanz. No tienen cantidad de canales en esa zona porque todo pasa por el partido de 25 de Mayo.

“Hay que seguir trabajando, hay que estar en los comités de cuenca, para poder mejorar la salida del Vallimanca”

El Vallimanca en el proyecto de la cuenca al Río Salado, hay rectificación del arroyo, que pega muchas curvas para que no se desborde, hay un trabajo que hay que hacer con 25 de Mayo, para poder sacar todo el agua de Hale y Villa Sanz a través de canalizaciones, que no tiene salida natural. Hay que tener en cuenta que nosotros estamos 100 metros sobre el nivel del mar. Tenemos 400 kilómetros, para drenaje y con muy poca pendiente nada.

En 400 kilómetros tenemos 100 metros. Si no es a través de canales, hasta que no supera un bajo, entonces hay que ir cortándolo un poquito más, pero hay que hacerlo en forma civilizada. Y el ensanche del Salado, imaginemos que alguna vez se termine esa obra.

“No va a haber problema con las plantas urbanas”

Nosotros tenemos el camino, por ejemplo, a la 226. Entre la ruta y la vía están todos los caminos que unen las chacras. La bajada del Club Buenos Aires, la bajada de la granja, para que la gente entienda. Eso tiene que estar todo alteado, porque son los terraplenes que el hombre puede hacer para que no se venga el agua del desborde del Vallimanca. Esas cosas también tienen que estar previstas dentro de un plan.

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