El bolivarense comparte categoría con Héctor Velázquez, René Amador y Juan Frenadillo. “Jugamos en cuarteto el primer día, salimos terceros; al otro día, jugamos parejas lo cual tuve la suerte de salir campeón con mi compañero Juan Frenadillo; al siguiente día, jugué parejas con René Amador, quedando subcampeón”, explicó. 

Diego quedó muy contento con su actuación, ya que hacía cuatro meses que no participaba de un torneo, y se hace complicado mantenerse en un alto nivel cuando no se entrena. En las competencias te encontras  con jugadores de elite, asique tenes que tener un buen día para poder llegar a las instancias finales, mencionó.

Además comentó que en el campeonato arrancó bien,  a pesar de que en el “individualito” no pudo hacer muchos palos, por lo cual los punteros se le alejaron, sin embargo se clasificó a la final, terminando en el  séptimo lugar.

Asimismo explicó que los palos son acumulativos desde el primer día hasta la final, por eso al no estar entrenados, “el cansancio se hace sentir, los brazos ya no son los mismos, la dirección no es la misma, la coordinación de uno no es la misma”. Tenes que tener la mentalidad de arrancar bien, concentrado y mantenerse en esa línea hasta lo último, añadió. 

La falta de práctica hace que uno tenga más errores, sumado a la presión que se siente, porque hay un muy buen nivel en el bowling. Sería ideal tener una cancha en la ciudad, para que muchos como él puedan tener un entrenamiento. Cuando empecé, “yo lo elegí como deporte”, y no deje más, indicó Diego.

El bolivarense contó que desde el 2014 es parte del equipo de Trenque Lauquen y han obtenido buenos resultados. Además, Diego comentó que aún no se sabe cuándo es el próximo torneo, ya que hay receso por fiestas, pero cuando regresen, buscarán alguna competencia. También le agradeció a la familia por el apoyo de siempre, porque eso es fundamental.

Benito Gramajo, Vanina.