El que pega primero, pega dos veces

El partido llegaba a la definición de final tras una victoria importante y conttundente de los dirigidos por Leo Astorga ante Vallimanca, algo que lo convertía en un adversario que no era tan sencillo de vencer. Portilla pobló el mediocampo y se animó a un planteo tático con un "doble enganche" como lo hicieron Braian y Matías Novelli. En la recuperación trabajaba el cuatrimotor Cristian Molina y Franco Diez pivoteaba para alimentar al goleador de la tarde, Franco González.

Vino una pelota por derecha que Diez trabajó muy bien, la cubrió con oficio y desbordó como si fuera un wing derecho, metiendo el centro pasado al segundo palo donde el 9 puso la testa y así comenzó el camino al título.

Ya manejando el medio campo, si bien la tenencia del balón era compartida con el Depo, los de Portilla comenzaron a encender alertas hasta que Leo Astorga decide incluir a Lappena para recuperar la pelota, en reemplazo de Farías. En esos minutos Gonzázlez busca un balón por derecha-posición similar al centro del gol anterior-pero gira hacia afuera y la empalma de zurda para que se clavara en el ángulo superior derecho de panchito Cervone que nada pudo hacer para evitar el segundo tanto del partido.

Lappena ordenó el mediojuego pero el Depo no logró ser profundo para lastimar

La segunda etapa fue de manual para Agrario que una vez que está arriba cierra los espacios y especula con la necesidad del rival para rematar el partido. Si bien hasta el minuto 20 hubo un par de llegadas de los pirovanenses, nunca peligró el triunfo de los dirigidos por Portilla. Finalmente Martín Herrera colocó la cifra definitiva con un lindo gol y permitió que la euforia de los del Agra saliera por los poros.

El biuen arbitraje se refleja con la continuidad del juego y cuando el hombre de negro(aunque ahora cambió el color de la indumentaria), pasa desapercibido. Ambos técnicos movieron los bancos e ingresaron jugadores en la segunda etapa buscando diferentes alternativas.

Punto final y entrega de premios

Un segmento muy emotivo, ya que en el campeonato que ocurrió el fallecimiento del Luís Del Valle López, no se había definido un trofeo y en conjunto con los delegados se decidió entregárselo a la familia de Luís. Llevando este campeonato su nombre, para recordarlo de la mejor manera.