Entrevista al periodista bolivarense Miguel Osovi, en la previa de la final del mundial Qatar 2022.

Miguel jamás olvida su hogar, Bolívar. Su trabajo constante, humildad, respeto y  pasión por el deporte, han forjado su perfil dentro de los medios de comunicación y lo han colocado en lo más alto, como uno de los periodistas deportivos más reconocidos del país.

DE BOLÍVAR AL MUNDO

 “Buen día Daniel. Un saludo para todos ustedes por ahí. Acá el clima ha vuelto a tener temperaturas altas y no lo digo solamente por los miles de argentinos que están esperando el partido del domingo acá, en Doha, sino que ha recuperado otra vez la temperatura que tenía cuando vinimos hace un mes y unos días, porque la semana pasada fue muy fresca, pero ahora hay un día espectacular . Creo que es la antesala ideal de lo que vamos a vivir el domingo.

Acá es invierno, anochece muy temprano, a las cinco de la tarde ya es de noche. Cuando vinimos, las primeras semanas, las temperaturas eran superiores a los 30º prácticamente durante todo el día y llovió hará 10 días y la semana pasada hacía mucho frío, especialmente en la noche, bastante frío, lo cual tuvimos que sacar las pocas camperas o abrigo que había que habíamos traído. Pero ya ahora de vuelta está la temperatura más acorde a lo que pensábamos, teniendo en cuenta que acá es invierno, imagínate en verano, las temperaturas superan siempre los 40º”.

¿Ha cambiado el clima allá?, porque decían que en esa zona llueve muy poco en el año?

“Dos o tres veces al año y la semana pasada llovió, dos días seguidos a una determinada hora en distintos lugares.

En uno de esos lugares que me había trasladado por acá, porque es muy amplios es una ciudad muy amplia que se junta con las ciudades que están cerca y no, no llovió en ese lugar y en otros lugares dicen que llovió y que la gente –incluso- sacaba los paraguas, algo insólito acá. Pero bueno, sí, también imagino que acá también debe estar cambiando el clima, producto del efecto climático, como en todos lados, como sucede en la Argentina”.

¿Cómo encontraste Qatar? Porque en realidad era un poco enigmático, hasta poco tiempo antes que pensar en El Mundial. Sobre todo por esta construcción velocísima que se hizo de los campos de juegos, de la infraestructura y todo eso.

“Sí, veníamos con muchos pruritos, sabiendo que ya teníamos -en varios casos- algún concepto preestablecido de cosas que finalmente no se cumplieron al 100%. Acá,  la rigidez que hablaban con respecto a la conducta, a la vestimenta, a que no había que gritar, a que había que evitar andar con ropa que mostrase los hombros o las piernas, todo eso no se ha visto, no hay ningún tipo de restricciones, al contrario.

Sí, no se ve alcohol -tomando la gente- en la vía pública, pero si hay lugares en donde se puede tomar alcohol.

Con respecto a la ciudad, se ha construido una ciudad impactante y en muy poco tiempo. Aquellos que han venido (yo no había venido anteriormente) pero los que habían pasado por Doha -hace 5 o 6-  años dicen que esto está el doble o el triple de grande, con construcciones increíbles, de una arquitectura impresionante. Han armado una infraestructura alrededor de la Copa del Mundo que lo transforma en un país de primer mundo, en ese aspecto.

Fue sorprendente por ese lado, porque esperábamos más rigidez en algunas cosas. Y por suerte, quizás sea durante la etapa del mundial, esa rigidez en cuanto a conductas,  no se vio tanto”.

DE COSTUMBRES, ABRAZOS Y ESTADIOS

 “Con el clima mundialista  hay abrazos por todos lados y llama la atención porque también ellos, en particular los árabes o incluso acá, en Doha, hay  mucha inmigración de países como India, Pakistán, Bangladesh, y ellos tienen por costumbre -a  veces, los hombres- ir abrazados en  la calle caminando como sensación de amistad. Y lo ves. Por eso muchas veces utilizamos preconceptos que nos habían dicho y no se dieron.

¿Con la comida, cómo te llevás?

Bien, bien, a mí me gusta probar la comida internacional, ya hemos probado shawarma o varias comidas que tienen que ver con lo local, pero también nosotros estamos hospedados en La Perla, que es el único barrio, en realidad es una parte de la ciudad muy grande,  donde habitan la mayoría de los extranjeros (europeos, en gran mayoría), entonces hay comida internacional para comer y no hay inconvenientes; siempre uno puede variar de acuerdo a la elección y cuando empieza la Copa del Mundo comés lo que podés, en el lugar que podés.

Al principio te vas, te  sentas en un restaurante, pedís la comida, tratas de probar algo y después cuando empiezan  los  partidos, los programas, pasas por un supermercado y compras un sándwich o comés algo en algún algún local de comida rápida”.

No tiene fútbol Qatar para evitar todos esos estadios después del mundial, se habla de ese tema ¿Qué va a pasar?.

“Hay uno que lo desarmaron, lo están desarmando por completo, es el 974, donde Argentina jugó ante Polonia, es el que tiene los containers, que ya se los sacaron, están desarmando  las gradas, que  las van a donar a otros países de menores recursos; se  va a utilizar toda la infraestructura cercana –incluso- para después construir algunos paseos comerciales por esa zona. Hay otros estadios en donde se le va a disminuir la capacidad, pero la mayoría son estadios que tienen diferentes funciones.

En algunos, por ejemplo, en Al Bayt, donde se hizo la ceremonia inaugural y el otro día el partido de Francia de semifinales (está más lejos, está en Alkor, una ciudad cercana) es el que parece una carpa, viéndolo desde el aire, ese tiene –además-  un hotel de 5 estrellas adentro, paseos comerciales, restaurantes; entonces se va a utilizar toda la infraestructura  para el turismo.

Acá se ha planificado para que sea un Polo Deportivo muy importante en la zona.  El año que viene la Fórmula 1 será en Doha  y se va a utilizar mucho de la infraestructura hotelera, para eso;  está el Moto GP que se corre todos los años y ellos tienen la ilusión, en el 2036, poder organizar los Juegos Olímpicos.  Es la ilusión, lo veo difícil porque ya le han dado un gran evento como esto, pero tienen la ilusión de albergar los Juegos Olímpicos y los estadios son imponentes, impresionantes.

El estadio de la final del domingo, el Lusail, va a quedar como el Estadio Nacional de Doha que es maravilloso”.

MUCHACHOS, AHORA NOS VOLVIMOS A ILUSIONAR

Miguel, en lo deportivo, ¿Cómo has visto este mundial, qué te ha sorprendido, con respecto a los equipos y de nuestra selección, qué es lo que más te ha gustado?

“Con respecto a lo general, ha sido un mundial con sorpresas y confirmaciones. En todo caso las confirmaciones, terminaron de dar sorpresas. El crecimiento de algunos equipos africanos, con Marruecos a la cabeza, el crecimiento de los países asiáticos, con Japón como principal estandarte pero viendo por ejemplo nosotros, en primera persona, lo que pasó con Arabia Saudita.

Argentina ha ido de menos a más, creo que el golpazo inicial en la derrota, en el primer partido, en vez de generar dentro del grupo dudas, lo que generó fue fortalezas, saber que tenían que salir con mucha fe de la situación y han salido. Han ido de menos a más, han tenido muy buenos rendimientos y sobre todo se ha consolidado una idea futbolística que trasciende estrictamente lo del campo de juego generando una empatía muy grande con el público, como pocas veces hemos visto, con la selección argentina, lo cual me parece que es todo virtuoso, que empuja y lleva para adelante a la selección que vuelve a estar en una final, con muchas ganas, lógicamente, de poder lograrla.  O también, como hablábamos en la previa -con Daniel-  si no se obtiene, saber que se  puede festejar y disfrutar el camino. Creo que el camino lo hemos disfrutado, porque desde hace mucho tiempo no hay una selección que reúna, prácticamente, la totalidad de los argentinos atrás de ella”.

Ahora se habla de cábalas, coincidencias con el árbitro que nos toca. Empezamos a mirar esas cosas. Además,  también se vuelve a dar que un  equipo rival deja que un jugador, como Mbappé, hable menospreciando a la Argentina. Eso,  ¿es así?

“En realidad anoche, en el programa de la Televisión Pública, volvimos a pasar las declaraciones de Mbappé -en su momento- cuando dijo que el futbol europeo era más competitivo y tenía ventajas con respecto a las selecciones sudamericanas porque vivían jugando con equipos de primer nivel, cosa que no pasa en Sudamérica.

Me parece que no fueron tan polémicas como finalmente las tomaron y me parece que forma parte más de un desconocimiento que -por ahí- tiene el europeo de lo que sucede en Sudamérica, más que una mala fe para hacerla. Lógicamente que eso va a ser utilizado, incluso, en el equipo argentino como mayor ambición para la victoria.

Respecto a las cábalas, hay millones. Una de ellas, respecto a la indumentaria, en el ´78 y en el ´86, cuando Argentina jugo las finales, jugó con la celeste y blanca y este domingo va a jugar con la celeste y blanca, y en el ´90 y el 2014, cuando jugó la final, lo hizo con la camiseta azul y en ambas perdió. Es otra de las cosas que se utiliza, sobre todo, en redes sociales con el hashtag #ElijoCreer. Se están buscando todas similitudes que  me parece que -más allá de las cábalas que podemos hacer cada uno de nosotros- tenemos que estar muy confiados y sobre todo, más que confiados, con mucha fe de que el equipo está a la altura para disputar una final. Puede pasar cualquier cosa, Francia es el último campeón del mundo, pero Argentina está a la altura de poder ganar”.

Hoy veíamos los vuelos, de última, que salieron ahí,  de Aerolíneas Argentinas con más de 260 pasajeros. Los argentinos quieren colmar el estadio y la AFA lanzaba 10.000 entradas oficiales, desde la seis de la mañana…

“Estaban esperando eso, poder confirmar la cantidad de entradas que tenían disponibles. Muchísimos argentinos sin entradas acá en Dubái. Ha sido una constante la pasión de los argentinos. Salvo en el primer partido con Arabia, que había muchísimos argentinos y muchísimos árabes; lo mismo pasó ante México, con el segundo partido, países que trajeron mucha gente, después Argentina siempre fue local.

Siempre -en los estadios- hubo gran mayoría de argentinos por sobre los hinchas del rival, va a suceder lo mismo, porque hay pocos europeos. Es el mundial de los argentinos, de los mexicanos, de los árabes, los asiáticos, los africanos, pero no así de los europeos, entonces hubiese sido mucho más difícil conseguir entradas si hubiese pasado a la final Marruecos porque está repleto de Marroquíes, en esta ciudad. Al haber pasado Francia yo creo que hay posibilidades de conseguir entradas y esos argentinos que están viniendo o que están acá,  sin entradas, creo que todos van a poder conseguir la localidad, porque el estadio es para 80.000 personas y va a estar totalmente colmado para la final”.

LOS DOMINGOS EN FAMILIA (Y CON AMIGOS)

“Justo al mediodía  es la final. Al mediodía de un domingo. Es el horario donde se juntan todos los argentinos. El domingo al mediodía es el horario donde te juntás a comer un asado con los amigos, la familia.

La gente se va a reunir a ver a la selección y qué buen motivo, porque si algo necesitamos los argentinos es reunirnos alrededor de algo que nos une y creo que este es el caso especial, excepcional”.

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Audio: Radioshow 16/12/22

Edición: Lore Palacio